Me voy a Grecia unos días y Pedro se
queda por aquí, aun no está claro si en Camboya o si irá a Kuala
Lumpur.
Necesitamos un poco de espacio y de
tiempo. No se si será por haber pasado tantos días a tiempo
completo juntos, por una crisis de identidad, de edad o una crisis
sin más. Tal vez sea que aprender a ser libre a los cuarenta es
difícil, nadie nos dió ninguna indicación y salir sin brújula de
la prisión social puede ser un camino complejo.
Los dos esperamos que se nos depejen
las ideas y esta historia termine con un final feliz, siendo ambos
felices, que al fin y al cabo es lo único que cuenta.
Un abrazo.
Pues mucho ánimo señorita y que las cosas sean para bien :)
ResponderEliminarGracias Diana!
EliminarUnas veces despacito y otras brincando, pero siempre creciendo... y amando.
Un abrazo.